La lógica cultural nos ha llevado a expresarnos quejumbrosamente de la banca. Expresiones como “¿para qué están los bancos si no nos ayudan?” “Trabajan gratis con nuestra plata en cta cte y no nos financian de acuerdo a lo que necesitamos!”, suelen constituir la caracterización que hacen empresas y clientes.
Lo primero necesario es comprender que todas las instituciones financieras formalmente establecidas están reguladas por normas sumamente estrictas. Particular énfasis es que deben mantener cierto nivel de capital líquido de manera preventiva en caso que su cartera de créditos experimente deterioro a causa de morosos y de impagos de larga data (cartera vencida).
Sin embargo, la experiencia también nos señala que hay que considerar que desde las propias empresas la información financiera y económica frecuentemente no es clara, suficiente y contundentemente demostrativa de sus fortalezas. Tampoco se acompaña de presentaciones del modelo de negocios y sus proyecciones, es decir de la robustez cualitativa que al final del día es la generadora de los resultados; ciertamente esta debe ser coherente con los informes entregados.
El ingrediente de inestabilidad y cambios crecientes del entorno más la convulsión que experimentan los mercados, representan el 3er elemento troncal de este breve mensaje.
FALSO AFÁN: se puede concluir que es imposible que prosperen las negociaciones para obtener nuevos financiamientos debido al desalineamiento de los elementos fundamentales que sustentan las solicitudes.
Llámenos, le aseguramos óptimas presentaciones con sólidos argumentos, negociando en representación de Uds.